—Me pregunto por qué, si desde octubre de 2024 entró en vigor la Ley de Comunicación Social, el Departamento Ideológico tiene que salirse ahora con una «Estrategia de Comunicación Política» que «ratifica que el Partido organiza y orienta los esfuerzos comunes en la construcción del socialismo y en el avance hacia la sociedad comunista, y trabaja por preservar y fortalecer la unidad patriótica de los cubanos y por desarrollar valores éticos, morales y cívicos».
—Parece mentira, cuadro. Andabas tan esforzado en la construcción socialista que no te diste cuenta de que por esa terminal ya pasamos, que lo de nosotros ahora es avanzar a pasos agigantados hacia el comunismo.
—Estoy acomplejado.
—No te sientas mal por eso. Era difícil intuir que una política como el Ordenamiento, que no por gusto fue pensada y recontrapensada durante diez años, no buscaba otra cosa que dar el paso decisivo para arribar a lo que soñaron Marx, Engels y Lenin: la desaparición del dinero. Sin tanto estudio ni teoría, Murillo y Gil lograron demostrar que el salario no sirve para nada.
—La culminación del esfuerzo de ese par la está dando la muchachita que descubrieron en Cienfuegos y que responde al nombre de Marydé Fernández López. No sé qué esperan para designarla jefa del Departamento Ideológico. Está diciendo cosas muy profundas, como eso de asegurar que la Estrategia de Comunicación Política aprobada tiene tres pilares fundamentales: «la credibilidad, sustentada en hechos; la empatía, alineada con las preocupaciones ciudadanas; y la resiliencia, que es la capacidad de adaptarse y responder a los contextos cambiantes de nuestra sociedad».
—Los tres pilares se cumplen: hay que creerles, no importa si los hechos no los veas por ninguna parte y te preguntes qué hacen. Tu preocupación ciudadana es que sean cada vez más antipáticos, y termines adaptándote a que en nuestra sociedad no cambian ni los contextos.
—Esa compañerita despunta más que Polanco. Proclama que ese nuevo documento, ya aprobado por el Buró Político, es «una herramienta de articulación y coordinación para entender, concebir, ejecutar y evaluar la comunicación como eje transversal y recurso estratégico en la elaboración y perfeccionamiento de políticas y planes de desarrollo, tanto a nivel nacional como local, y su oportuna socialización».
—Lo de «eje transversal» debe haberlo dicho a propósito de la cantidad de ómnibus Yutong que están parados en las terminales por falta de esa pieza.
—Quizás ahora nos sea más fácil entender y concebir que no se halla coordinado más con los chinos para que no falten recursos estratégicos para el transporte.
—Son las cosas que tratará de corregir esta Estrategia. Nadie le ha traducido bien a Xi Jinping lo que ha sentenciado varias veces el presidente cubano: que nuestras relaciones con ellos están en su mejor momento.
—Yo estoy movilizando mi voluntad para ver si logro articular algún día el discurso de Canel. Por lo pronto, me entusiasmo con lo que expresa Marydé de que «necesitamos una Comunicación Política efectiva, que conecte con las audiencias, forme valores, eduque sensibilidades y gestione percepciones». ¿Podrías explicarme en qué consiste «gestionar percepciones»?
—No sé. También habló de «gestionar crisis».
—Eso lo hacen muy bien. Entré en una de ellas cuando la oí mencionar que debíamos «combinar canales mediáticos, aprovechando herramientas de registro y análisis de datos y la Inteligencia Artificial, con la retroalimentación directa del contexto en tiempo real para ajustar mensajes y priorizar temas».
—Se la pasan priorizando temas. Acaban de realizar el balance anual de la Comisión Nacional de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria y Nutricional. Marrero señala que «urge pasar a una etapa superior en la implementación de la Ley SSAN». No se mencionó, por ejemplo, que la producción nacional de huevos cada día va más en picada, y que la de carne de puerco, que en 2018 había alcanzado un récord productivo de 200 000 toneladas, en 2024 cayó a poco más de 9 000, según el propio Granma «una cifra insignificante y muy alejada de la demanda y de las necesidades reales del país», que se traduce en precios que demuestran que el salario no sirve para nada.
—Para un bistec que se ha reducido en un 95.5 %.
—Lo de «pasar a una etapa superior» debe ser que muy pronto los puercos y las gallinas se declararán por desaparecidas del suelo patrio.
—A pesar de los llamados de Lazo en la Asamblea Nacional. Me parte el alma pensar en las veces que ese hombre ha dicho que «Lo que hace falta es trabajar y hacerlo bien». Es lo que la López llama «un proceso comunicativo dialógico y transparente».
—Eso lo entiende cualquiera: dormir con el estómago transparente sigue siendo la realidad de nuestro día lógico.
comentarios
En este sitio moderamos los comentarios. Si quiere conocer más detalles, lea nuestra Política de Privacidad.
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *