“Mami, dame carne”
“Mami, dame carne”

Mientras la ansiada carne, el plato fuerte, se torna cada día más jíbaro, algunos recuerdan con sorna el —varias veces declarado—, objetivo gubernamental de garantizar mensualmente cinco kilogramos de proteína animal a cada cubano.

“Mami, dame carne”
“Mami, dame carne”

Mientras la ansiada carne, el plato fuerte, se torna cada día más jíbaro, algunos recuerdan con sorna el —varias veces declarado—, objetivo gubernamental de garantizar mensualmente cinco kilogramos de proteína animal a cada cubano.